El Gobierno está dispuesto a prolongar la vida de las centrales nucleares que funcionan en España, a cambio de que los sindicatos y la patronal acepten la reforma de las pensiones. Dentro del amplio pacto social que el Ejecutivo está negociando con empresarios y sindicatos, una de las condiciones era revisar el calendario de cierre de las centrales nucleares en España para así preservar esos puestos de trabajo y parece que el gobierno cede en este punto.  Un punto que ha abierto el debate sobre el futuro de la central de Garoña cuyo cierre estaba previsto para abril de 2013.