El municipio de Polop vivió ayer un gran revuelo, al reaparecer en el pleno del ayuntamiento el antiguo alcalde, Juan Cano, que tuvo que ser expulsado de la sala consistorial por varios policias. Juan Cano salió de la cárcel en julio después de pagar una fianza de 20.000 euros, y ayer se presentó por sorpresa en el ayuntamiento haciendo uso de su acta de concejal, a la que no renuncia pesa a estar acusado de encargar la muerte de su antecesor, Alejandro Ponsoda. La actual alcaldesa de Polop, María Dolores Zaragoza, aprovechó la ocasión para contar que ha sufrido amenazas por parte de Cano, que un día le advirtió de que podía tener un accidente de coche. Según el sumario del caso, cuando Juan Cano perdió el acta de concejal de Urbanismo por su implicación en una extorsión, intentó continuar con sus negocios utilizando al antiguo alcalde. Tres años después, regresó a la política e ideó un plan para hacerse con la alcaldía.El sumario policial afirma que tal era el sentimiento de odio y fracaso que sentía por la dimisión del ex edil, Alejandro Ponsoda, que encargó su asesinato.