Todo está preparado ya para que dentro de unas horas las estrellas del celuloide pisen una de las moquetas más famosas del cine. La alfombra roja de los Oscar recibe los mejores cuidados por parte de los técnicos en las horas previas a la gala. Ante el temor de que la lluvia o la suciedad puedan deslucir el paseo, se ha cubierto la alfombra con plástico. La zona de llegada de las celebridades bulle de actividad, se ultiman los preparativos y se van activando las medidas de seguridad en los alrededores para garantizar que todo sale según lo previsto. El cielo amenaza con aguar la recepción de la fiesta, pero los más optimistas creen que el tiempo respetará la llegada de los candidatos. El Teatro Kodak se viste con sus mejores galas para celebrar la ceremonia de entrega de los premios más codiciados del cine en su 82 edición. Millones de ojos seguirán el evento por televisión.